domingo, 12 de diciembre de 2010

Pozo

"¿Esta soleado ahi arriba?"
silencio
"¿Me escuchas? ¿Alguien me escucha?"


El mar sopla desde su alejado reino. En el fondo, en algun lugar de este desierto existe un pozo, uno que hace tiempo olvidó que escondía agua; en el centro de esta ciudad, en medio de casas perdidas en el tiempo y junto a espaldas del grandes masas de concreto, hay un pájaro de piedra y bajo el una fuente, también aqui se ha secado el pozo.

"Entonces ese algo está aqui. Si pudiera alcanzarte, si pudieramos vernos una vez más..."

"Holaaaa. Holaaaaa."

El reloj apenas ilumina un resquicio, marca las tres de la tarde, arriba es verano y el viento sopla fuerte para alejar las nubes de lluvia que se avecinan.

"Aqui estoyyyy."

"¿Quién eressss?

"Eso intento responder."

"Holaaa..."

silencio.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Olas

Estamos ahora caminando sobre el Altiplano, en realidad es plano y alto, solo hay un espejo de lejos, uno con pequeñas olas y fuerte viento.

Sentado en un puerto lacustre, las olas intermitentes imitan un mar que no fue, veo pequeños barcos zarpar hacia islas de totora, niños que vienen de juego, niños que no volveran.

Hace frío, el mar que no fue llora y respira sin parar, estas solo también, parece silvar...

lunes, 25 de octubre de 2010

Avanzada

Vamos, es hora de comenzar. Pero es demasiado temprano, aunque nunca es tarde dicen por ahí.
Entonces nos levantamos y avanzamos lentamente, vamos apartando la espesa niebla con las manos, apenas y podemos ver diminutas luces frente a nuestros ojos, ilusiones ópticas tal vez; seguimos caminando y a lo lejos el viento que empieza soplar, parece traer una voz, un susurro que ha viajado mucho, un lamento que no se ha logrado esconder, por necesitar ser oido.

Nos detenemos, tú golpeas tu cuerpo con el mio, a tientas encuentras mi mano, la sostienes con fuerza, te acerco puedo senti, sentirte muy cerca mío. No estoy solo, pero no te veo.

El viento sopla con aún más fuerza, apenas y puedes detenerte, sostienes esa mano que esta atada a ti, no la soltaras. La niebla se disipa rápidamente, te internas,retrocedes hacía ella, corres, desesperadamente corres dentro pero el viento no perdona, no juzga, sólo corre impetuoso tras de ti.

No hay nada, no estas.

"solos"

El susurro te ha alcanzado; esa mano, cuerpo, ese otro que sostenías con fuerza se ha esfumado.


"Estamos solos, solos, repetidos al infinito"

domingo, 3 de octubre de 2010

Crónicas

Estas corriendo, buscando dentro de esta tormenta, un ojo, un espacio reducido de paz.

Sabado por la tarde: Tarde para levantarse, un tropiezo acompañado de un par más a los largo del día, finalizas con una pelea con papá y mamá; te vas corriendo de casa, caminas sin rumbro fijo, encuentras un columpio y tambaleas tus dudas, tristeza y los poco años que tienes. Hace frío y regresas cansado, con los ojos hinchados a casa.

Domingo por la mañana: Esta vez te miras al espejo, hace mucho que no lo hacías, pero por fin tienes esas ojeras que tanto buscabas, llorar en realidad te ayudo a que consiguieras eso que tanto anhelabas.

Lunes: El celular ha dejado de sonar tras agotar su última barra de energía. Una silla está caida en el suelo y de la viga está templada una sogilla, tu cuerpo es el peso que la tiempla.

Lunes por la noche: Los gatos se han reunido debajo tuyo, todo el nuevo ecosistema que eres tras muchas horas de muerto. Se revisan la orejas para ver si no hay ningún impostor entre ellos... Ellos inician la reunión, "Cronica de amos que son mascotas"

Un día de estos: Todo ha sido olvidado, un pequeño espacio en algún periódico fue lo único que conseguiste. Alguien lo ha recortado, porque creyó que tal vez no te estarias en completa soledad. Ahora se ha terminado el otoño y la primavera ha cambiado sus colores para dejar entrar más frío que de costumbre.

Al final, sólo dejaste una nota que fue borrada por un vaso de agua.

Un gato mira desde el techo de una casa, a ese perro que tanto alimentaste, tu único amigo, ahora el también es un nuevo ecosistema; nadie lo llora.

La reunión está a punto de comenzar, el vigía se ha ido, hay problemas, un gato ha perdido las orejas, es uno menos para el clan.

lunes, 30 de agosto de 2010

Clik

TEclea , teclea, teclea, ha olvidado el que sus dedos sirven para más cosas porque ahora todo esta haciendo clikc o escribiendo una dirección en el teclado de su muy usada computadora.

Ha despertado intentando combinar teclas para encontrar el amor y sólo se ha tropezado con una red social muy conocida... Ahora tiene una relación complikada...

La nariz no distingue los aromas, su tacto no discrimina texturas y sus ojos andan enganchados en sus sol desprendiendose de la pantalla LCD que lo ilumina.

Ha hecho tres revoluciones y en todas ha ganado; juntó su millon de firmas; llegó primero ha conseguir el millon de fans, envio una carta firmada por millones de usuarios a una superempresa. Pero se ha tropezado con el pero, hoy ha visto una chica de verdad y se le ha saltado el corazón del pecho aunque para ser exactos fue algo en su estómago que le ha caido mal; la verdad es que no entiende lo que le ha sucedido.

No pudo articular un solo vocablo, aunque movía frenéticamente los dedos "nunca volvere a salir a comprar. Desde ahora, 2.0 será mi mundo real, si también se puede comprar por ahi". Él ha regresado a casa corriendo, ha subido a su habitación, dejo a medio encender las luces, su puerta a 2.0 está abierta, cierra la puerta del cuarto quedando a oscuras, su nuevo sol ahora lo calienta, el nuevo mundo le abre los brazos y el sólo tiene que clikear.

viernes, 20 de agosto de 2010

Lapices labiales

Extraño esos lapices labiales que me prestabas cuando niña, y las cosas tan extraordinarias que me contabas cuando regresabas de alguna fiesta. Yo quería ser grande rápido, rápido pero nunca se acababa el día y tu siempre te ibas y dejabas tu estela de luz al atardecer, me abandonabas contando los segundos mientras sepultaba el sol. Yo nunca supe que tú eras más frágil que cualquiera, tu estabas tan feliz cuando te miraba, me decias "cuando crescas ya veras" y quería crecer y dejar de ver el sol, pero me daba nostalgia dejar de lado mis peluches y las flores que cuidaba en el jardin que sólo yo pude cultivar, entonces entonaba mis canciones inventadas y tarareaba hasta que era hora de despedir el sol.

Aquella tarde no dijiste nada, sólo escondías algo de maquillaje en tu mochila, pero me abrazaste y dijiste que me querias mucho.

Entonces cuando el sol despidió su último rayo las nubes tapizaron el cielo de oscuros tonos, fui tan feliz, gotas de lluvia empezaron a bañar la tierra seca y ese aroma me invadio. Extraño tus lápices labiales, y esos grandes anillos también.

Cuando volviste supe que el mundo había cambiado, que las cosas eran de matices inexplicables que el sol no se ocultaría de nuevo. Entonces yo estaba llorando debajo de la silla. Había escrito una carta para ti, yo supe que no viviría para cuando llegases, cuantas cosas quise decirte pero escribir nunca se me ha dado bien. La lluvia era tan linda, pero me cai y cuando me levante todo comenzó. Cuando llegaste sonreias y tenías la blusa puesta al revez, te acercaste y no olias ya a tí me abrazaste y no eras tú o tal vez no era yo, en serio creí que estaba muerta.

Te sentaste a mi lado y empezaste a contarme una historia que no entendí, yo esperaba morir pero no me sentía ni débil aunque si un poco cansada, de pronto giraste rápidamente el rostro y me diste un beso en la mejilla, yo lloraba y a ti no importaba, luego te levantaste y dijiste "tontita, no moriras. Ven vamos al baño"

Yo no creo en ti y ahora sonrio tanto como tú, extraño mis rosas y tambien mis claveles, pero ahora él me ha dicho que las uvas son más dulces en otoño. Siento su aroma, sus manos deslizandose por mi cuerpo, el estremecimiento de la lluvia en algún lugar de mis recuerdos.

Ella era la mejor cuando yo era yo.

Ahora sonrio tanto como ella y entiendo que los papeles arrugados nunca podran ser como jueegos artificiales.

martes, 17 de agosto de 2010

Supongo que has visto el cielo remachado de extraños colores grises y te has preguntado cuando fue que dejo de estar pintado de azul, has buscado un lugar donde recostarte y sólo te tropiezas con infinitos senderos de concreto. Ahora te preguntas donde está ese verde o amarillento pasto que era el nexo con el mundo, que te recibía en su regazo para darte fuerzas, para saberte vivo.

Caminas mientras tanto chocas con una gigantesca caja de concreto que esta rodeada por paneles publicitarios, recuerdos de alguna época donde abundaba el pasto y el azul se extendía hacia el infinito.

Anochece y las luces se encienden desapareciendo el poco rastro de cielo que se colaba entre las rendijas de grandes edificios.

viernes, 13 de agosto de 2010

Vacío

Ella esta sentada y mira sin cesar un pequeño reloj que se ajusta a su muñeca, intenta detener el tiempo para poder vivir en la felicidad que tanto posees cuando se encuentra entre todo ese bullicio que aguarda por ella, aquel que entona notas desde cilindros huecos.

Se levanta y empieza agitarse al son de la música que se esparce como salero en el viento, es tocada y de pronto todo tiene sentido nuevamente, el vacío ha desaparecido completamente. Las notas poco a poco se disipan como la lluvia se escurre debajo se cielo azul sin estrellas o cielo negro con estrellas, se detiene despues de rodearse a si misma, sonrie a un interlocutor aguardando en las sombras de la inexistencia, en sueños baila, canta y concurre con ella a los suplicios de un camino oscuro en una anacrónica ciudad derruida.

Cada nota tiene un hálito de despedida, una sumatoria de nostalgias que se empozan en el fonfo de ese silencio vacío que lo absorbe todo; vuelve a mirar el reloj, abre los ojos con esfuerzo y entre la cuasioscuridad lográ vislumbrar la manecilla delgada que apunta a las diez mientras la pequeña está posada en las nueve, sudor frio le devuelve a la realidad, se apresura, levanta, agita, respira sin pausa a intervalos, despide a sus compañeros que todavía danzan y cantan al compas de tubos de madera, llenando las ruinas circulares donde yace una memoria olvidada.

El cielo se pinta de gris y cubre las pequeñas luces que alumbran desde algún lugar del universo, la música se aleja mientras ella camina por senderos enclavados en rejas y atravesados por miles de transeuntes que han destrozado sus oidos con auriculares que emiten mundos alternos.

Calidez, se enfría en la resta agil de notas que han sido devoradas por un agujero negro oculto en el plexo. Es tarde y corre, la musica y la felicidad se desempolva de ella.

Hay un vacío que se extiende en el horizonte huérfano de sol.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Umbral

Tu nunca supiste como era el volar con vértigo.

Ella rompe el silencio mientras te mira de reojo y de pronto todo cae a una velocidad vertiginosamente controlada, te diviertes e intentas asimilar el por qué de tantas vueltas de campana que no se detienen, tan abrumados entre ambos sólo resta entonces gritar y desfogar con mucha fuerza al rio que corre por debajo del cielo donde estan ahora.

Suspendido nuevamente en el aire, esta vez tú la miras y puedes sentir tan cerca su alejada presencia, ya no es mañana sino un tal vez elevado entre luces multicolor y gritos que se acercan a las nubes para alcanzar transeuntes mucho tiempo despues. Ella sonrie y grita no tienes nada que decir y el momento es bueno para evitar decir algo, sonries para ti y nuevamente caes convirtiendo tu cuerpo en una maravillosa maquina que vuela atrapada en un gigante de metal.

Las olas intermitentes llegan a su fin, minutos contraidos en segundos se acaban y lentamente se detienen sobre ti, el cielo ha regresado a su lugar y tú apenas entendias tu miserable pequeñez. No importa, abren las rejas de tu carcel metálica; ella se arregla en cabello todo alborotado intentado pasar desapercibida. Te giras y miras alrededor algunas chicas hacen lo mismo, sólo miras al cielo. Estiras la mano y bajas la vista hacia ella, te sostiene y la atraes para ti, sutilmente la envuelves entre tus brazos, pero son apurados por los mecánicos, tienen que bajar, maldices en silencio.

Como algodones de azucar que han perdido su rumbo y vagan por el poco cielo que tienen hasta ser devorados por el suelo.

Estas atado, mejor dicho encapsulado, y una caja de metal te enseña lo que niegas cuando la ves.

Sólo resta ir hacía el juego llamado salida, y el carnaval te abre las puertas a la realidad, te pesa pero avanzas, ella poco a poco suelta tu mano, inevitablemente se aleja de a pocos, gira el rostro; cruzan el umbral, se detiene, mira hacia atras, regresa sobre sus pasos, te toma de la mano que esta abatida en el limite de la crudeza, la jala de un tiron te hace cruzar el límite, se acerca, levanta y coloca sus labios sobre los tuyos. Te suelta, se adelanta y desaparece entre miles de personas que regresan a sus vidas que no son.

viernes, 6 de agosto de 2010

LA VOCACIÓN SINCERA

Abraham Follano.

La cortesía; de modo sólito, consiste en mentir para mostrarse generoso ante los demás. Los artistas, entre ellos los literatos suelen ser corteses con la gente que los va a leer. En todo caso, ser sincero es un riesgo que parece un redentor fracaso.
Tesla prefiere considerarse soñador y no escritor. Ante los demás, es esta consideración una hipocresía que pretende levantar su autoestima y saciar los ingentes prejuicios de los demás; se ha presentado como un joven que gusta de la literatura y que además escribe.

Ajeno a los delirio inapelables del arte. Los espíritus de la poesía le son esquivos, no le gustan los poemas ni otras composiciónes literarias, nunca ha escrito poesía, escribe otras formas de literatura, pero es consciente de que lo hace sin felices resultados, no irradia talento de escritor, está seguro de que ese don, el oficio de escribir; no lo dignifica.

Se demora mucho para terminar la lectura de cualquier obra, no le gusta leer, le resulta extenuante y siempre lo hace porque es una forma de seguir soñando y mejor aún, precipitar el sueño.
A sus amigos predica que lee mucho, lo ha hecho pero no con el gusto que aparenta cuando manifiesta sus críticas infundadas y opiníones vanidosas.
Lo cierto es que a Tesla, le gusta dormir y lo ha proclamado sin pudor a sus amigos de la vida real y de sus sueños: que es; además, un ocioso irremediable y que ese estado le parece perfecto para su felicidad.
Cada vez que llega del trabajo, saluda a su madre con un beso a la mejilla, ella por lo general no lo trata bien (es comprensible), le sirve el almuerzo, con la resignación de dar de comer a un parásito, no pone el alimento al fuego, le invoca un pliego de reclamos que a él, le parecen desmesurados, aunque en verdad sean razonables y justos; siempre hace lo mismo, se queda en silencio, espera que su madre se desahogue, termine su largo discurso y, concluye agradeciendole la comida, mas por un gesto de costumbre que de convicción.
Termina de almorzar, le dice a su madre que se va a su cuarto a leer, ella sabe que no leerá ni estudiará, es rigurosa con su sentido intuitivo, sabe que se irá a dormir, pero como Tesla es joven, no le dice nada para evitarse una discusión inútil con un hijo que no le ha salido, pero que le ha venido descarriado e ingrato.
Mientras va a su habitación; antes, saluda a sus tres perros, juega con ellos, les canta, los insulta cariñosamente en un momento mezquino que no devuelven el cariño con que éstos lo colman.
Entra a su cuarto, tiene sueño, no cierra su habitación; es holgazán en exageración. La mejor muestra de su ociosidad es quitarse los zapatos, sin haber desatado las hileras, se desviste; tira la ropa por lugares, en donde a menudo, luego, le costará mucho encontrarlos, esta demás escribir que es desordenado, la cama esta desatendida.
Se desnuda, es negligente, tiene gripe y no se cuida, hace tres días que se desangro y no ha aprendido la moraleja, saca el colchón, lo pone en el piso, saca las almohadas, se tiende en la cama, no concilia el sueño rápidamente.
Existen dos formas de apresurar el sueño, y es lo único en lo que Tesla se da trabajo, una es leer un libro aburrido, mejor si es de Vargas Llosa o la Revista que editan en su grupo de estudios; la otra, más eficaz consiste en masturbarse, pensando en una amiga que hace poco le ha revelado con una sonrisa jocosa que le gustaría que lo haga pensando en ella.
Opta por la habitualidad de las tarde tibias de verano, prende su equipo musical, pone las canciones que le gustan más "Confesiones de Invierno" u otra que le parece de antología: "Canción para mi muerte", ambas de "Sui Generis", se masturba con un placer de pródigo, su imaginación concilia las mujeres mas seductoras y bellas que conoce, además de su amiga.
Luego de esta diligencias cortas, el sueño no le es esquivo, se entrega a lo que ha pensado que es lo único que sabe hace bien… Dormir.
Continuará.


domingo, 13 de junio de 2010

Paso

Desde entonces ella sólo sonrie a través de un cristal polarizado, sostiene un ticket y mira un paisaje que pasa indeterminadamente, infinitamente. Esperando el momento en que el límite de su sueños y la realidad sea por fin roto.

En algun momento el cielo partio sin el tiempo de aliado y ella quedo antrapada entre dos inmortales, ella fue la única que en realidad murió.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Plegarias

Ella ha visto subir tres nubes al cielo pintarrejeado de abedules, se detiene y busca entre sus bolsillos el instrumento que desdibuja y transforma la materia, sonríe lo ha encontrado ,un pequeño frasco que desenrosca mientras tararea una canción que viene de algún lugar de su niñez sellada entre campos dientes de león y mariposas multicolor, se dispone a elevar al cielo sus plegarias y sopla al son del viento; burbujas transparentes salen del instrumento, se elevan para alcanzar las nubes.

"cuando era niña amarraba cartas a globos para que las lean papá y mamá, así llegaban más rápido"

Ella se detiene y ve perderse en el cielo los círculos que vagan en busca de sueños que cumplir y pesadillas que apagar.

sábado, 1 de mayo de 2010

Sonatas

Teclea, teclea... se ha sumergido tras velos de sueño, pero sus dedos no dejan de moverse al compas de las manos diestras de la maestra que esgrime su bisturí inexistente plagado de nostalgias y de adioses levantados entre silencios.

Medianoche y continúa su viaje por calles frias que se esparcen como columnas de hormigas condenadas a un trabajo infinito en una ciudad pequeña que oculta sus pecados en desiertos tendidos entre cerros secos y malditos de espinas solitarias.

Ella ha levantado una casa de metal, acerado, la lluvia se une a la sonata y un niño se ha parado en el umbral de la puerta que ella ha dejado abierta, es una sombra cubierta por la noche, un ancla que no ata ni una cometa.

Te has levantado intentando alcanzar el silencio, una maquina sorbe el suelo y remacha calles con venas de concreto (eres un camino alfaltado y yo solo una trocha sin destino). Caminas y se eleva sepultando tus recuerdos una caja de metal, vidrio, concreto y paneles publicitarios. Caminas sobre tus recuerdos y compras una caja de herramientas (tu has ido más alla, yo apenas me siento a esperar). No tienes nada que hacer, y lloras en silencio ella ha partido y no podras alcanzarle, te ha dicho adios y no te duele.

Bajo la luna hundida en un mar sin consuelo, un barquero esboza una sonrisa, no habra más recuerdos, no habra más dolor. Dolordolordolor ahora no fallaré.


El niño parte, no gira atras.

La sonata pinta el silencio, carmesí es el nuevo recuerdo, el olvido, tu adios...

lunes, 26 de abril de 2010

Dos

él está encontrando oroboros cuando camina hacia esa puerta cerrada por dentro, bajo una cicatriz no cerrada de un cerro que llora roca. él mira hacia arriba buscando el sol, la luna y las estrellas.

Ella ha llegado justo a tiempo para el adios, sus manos danzan sobre sus brazos. Maestra de ceremonias que agita un bisturí con delicadeza artística, un emisario marino ha huido de ella.

él ha visto tras la puerta.

Ella ha traspasado su adios.

domingo, 25 de abril de 2010

agujeros

los dias son grises desiertos
porque globos andan huerfanos
y los gatos apenas se acurrucan
en rincones olvidados de sí mismos.

miércoles, 7 de abril de 2010

Cazador

Ella camina abrazada de quien es ahora su protector. "El recogió la estrella que no sabía ser libre, esa estrella que era un sueño fugaz" Se abraza con todas sus fuerzas y aspira el perfume que tanto le gusta de él, ese aroma que le dice estas protegida, puedes sonreir; esboza una sonrisa entre la oscuridad de sus ojos cerrados y la piel del rostro que se oculta entre el muchacho que la protege. "El cazador atrapó el sueño fugaz, se enamoró pero su regalo fue liberarla. La abandonó, siguió camino al exilio"

Son las nueve de la noche, luces multicolor se encienden, apagan, aquellas que danzan al compas de música que emerge de las entrañas de luciérnagas tecnológicas. Dos sombras caminan una bajo la otra "El cazador está perdido y se pregunta por el sueño fugaz. Él camina con la estrella en el corazón, es feliz" Ella sonrie y al separar su rostro de quien la quiere en sus lágrimas de perdida, se pregunta si ahora puede ser libre "El le dio libertad, ella no supo beber la poción para usarla, lloró".


Ella vuelve a sonreir, el viento de la nostalgía acompañado de la duda ha pasado ya por su lado, el sol vestido de reflector se bambolea junto a la luna pintada de fluorecente verde...

miércoles, 24 de marzo de 2010

Columnas

Ellas caminan siguiendo las rieles casi inexistentes de un tranvía que envejeció con el tiempo, con la modernidad, aquellos titanes que lentamente desaparecieron entre el tumulto de personas que andan sobre ruedas y las tormentas de arena de este desierto llamado ciudad. Ellas, niñas sonrientes han encontrado un tesoro, caminan por la noche plagada de luz lunar incandescente, ¿Hacía donde llevará el camino? se preguntan tal vez, pero continúan con la vista pegada al asfalto que pérfidamente intenta cubrir lo que antes fue la huella de los gigantes.

A los lejos cinco sombras se vislumbran, caminan en orden como columna guerrillera presta a iniciar la batalla perdida, caminan una tras otra, cargando sus cuerpos como armas, sus rostros como sofisticados aparatos de dominación. Pero son niñas que apenas saben de batallas y muerte y sangre, sonríen y el mundo se ilumina, no saben que es el destello de sus armas disparadas al mundo.

La columna sigue adelante lentamente rememorando en sí mismas el camino del pasado, giran en las curvas, dan rodeos, y el camino continúa infinitamente, la niebla reclama su hora y empieza a cubrirlas, lentamente el viento trae los ecos de las cantos de aquellos que fueron, de los que son y seran.

La guerrilla ha vuelto a partir, con cinco, diez, veinte; niñas, niños, jóvenes, adultos...

jueves, 18 de marzo de 2010

eto...

Yo quise escribir cada día un episodio de una novela, que tal vez, sería mi vida. Quise abrir los ojos pero el abrir las cosas causa dolor.
Abrimos puertas y cosas que no sabíamos o que olvidamos se liberan y huyen sin rumbo fijo, huyen con miedo de ser recluidas otra vez, del olvido, del polvo, de los adioses tácitos.
Huyen y uno se pierde entre tanto dolor y nostalgia y alegría y cosas cuyo nombre todavía no encuentran en este mundo.

Quise escribir mi novela, mi otoño y primavera. Se derritió nieve y vi caer las flores de cerezo.
"¿A cuanta velocidad debo vivir para volverte a ver?"

lunes, 15 de marzo de 2010

martes, 16 de febrero de 2010

Sueño Fugaz

Ella dijo: huyamos, vamos llevame a tus laberintos, desemvolvamos los hilos de Ariadne. Sonreía a su interlocutor inexistente. Vamos, vamos...
Él en silencio cavilaba su respuesta hasta que dijo: No podemos, no existen hilos, ni madejas; he quemado hace mucho mi camino, no hay retorno para mí. Su voz llegaba a través de un laberinto que era mil, que era cielo, infierno y tierra, que era nada y todo; atrapado en tejido repitió: Tú eres un sueño fugaz, no podrías... no puedes, no podemos no hay marcha atras, y tú debes debes seguir, los sueños fugaces... te harías mortal y no podrías encontrarme, no puedes, no puedo ir por ti, ni tú por mí. Entre oscuros lugares empezó a rugir el minotauro en algún lugar, y el aire se hacía caliente, las hidras de seguro respiraban su fuego intentando destejer el laberinto donde estaban atrapadas sus cabezas, siempre buscándose.

"Llévame, huyamos, vámonos de aqui"
"No puedes, no podemos. He perdido el camino, de regreso a casa, de regreso a mí..."

El sueño fugaz continúa su viaje, sonrie con su figura inacabada y su alegría temporal.

"Me he perdido a mí mismo..."
"Aún te oigo, puedes seguir mi voz..."
"No hay regreso para mí, he quemado los hilos de Ariadne..."

En algún lugar del laberinto él busca su camino a casa y ella viaja por el espacio inacabado de infinitud, tal vez ya está dentro de ese laberinto, tal vez ilumina sin querer el cielo del perdido que apenas conoce de estrellas y caminos.

martes, 9 de febrero de 2010

Ideologias

Como ciencia pasada de moda. Camina entre dos calles que se dividen en ideologias, que segregan la libertad y dignidad en nombre de ambas.
La mira desde la otra acera; ella es de estatura pequeña, con una sonrisa que apenas sin querer esboza, siempre detentando la ideologia, contraponiendose a sus propios sentimientos. Él cansado de tanto atisbar por la cerradura metaforica que se representa en esas flechas rojas y azules que los separan, aburrido de tanta estupidez en nombre de pseudo bienes comunes y a punto de estallar por que no puede acercarse " es contraproducente, tiene que alcanzar sus metas..." se dice cada vez que esa ampolla de su alma esta a punto a vomitar los colores que tiene para pintar esa gris y vieja avenidad anacrónica. Esta vez toma una tiza de color, se agacha mientras nadie le presta atención, pinta una flecha que indica seguir a otro lado, es de color amarillo y verde y naranja, la flecha tricolor se termina dirigiendo la cabeza hacía el otro lado. Alguien se detiene al otro lado antes de que él se levante, alguien tropieza y cae; una pequeña niña que oculta sus lágrimas esta semilevantada del suelo frio de esa tarde de abril.

Se oyen pasos apresurados, un leve forcejeo. Se oye el silencio que se ha depositado súbitamente alrededor, se levantan susurros ahogados. Él no pudo resistir, ha corrido por ella, no fue dificil tomarla en brazos, decirle palabras, destruir la ideologia, intentar pintar nuevos mundos, limpiar el horizonte. Ella llora en silencio, sonrie para sí, para él, regala una sonrisa que se huye de ella, que desbocada corre en busca de él.

Se oyen pasos apresurados, se rastrillan armas, se apresuran a calllar el silencio, los murmurllos cesan, la caminata, el peregrinaje continúa.

Ráfagas de contradicción surcan de ambos lados, el plomo es mensajero de una carta sin retorno. Tal vez son bienvenidas con sonrisas.

domingo, 7 de febrero de 2010

Preguntas

Desde entonces, sólo queda un vacío insalvable entre los dos, uno que con gomitas y plastilinas de colores se intenta cerrar.

Sonrien y ella en el fondo piensa si él será feliz, si no es una máscara que se pone cada vez que se encuentran. Se sienta a su lado, aunque siempre las circunstancias los juntan y son felices aunque ella este al otro lado del espejo.

Caminan en la oscuridad y la lluvia canta una balada, él sonrie. Ella es feliz y todo basta, el cielo canta y ella continúa siendo feliz.

sábado, 6 de febrero de 2010

Mensajeros

Ella esta sentada tras un ordenador, entre lápices de colores y borradores sin nada que hacer. Con el cabello despeinado forma nuevamente su personalidad, ha borrado el facebook y con eso una existencia vacía que intentaba llenar; ahora tendra lo que desea, sus preferencias seran populares y todo el mundo la amará, todos adoraran su forma de ser, la nueva idol de la red se está forjando.

Se borra progresivamente,"odio a mi madre, me odio a mi, no sé..." se recrea tras un código binario, ahora está feliz, (estado: feliz y sonriendo como siempre) Todo el mundo la adora (incluso él, que la conoce nuevamente, que olvidó que ella era la muchacha despeinada que pedía mucho y no daba nada a cambio) Un nuevo intento de llenar el vacío que es ella misma; un nuevo rostro que mostrar al mundo, (uno vacío) lleno de ecos y ceros y unos; relleno de colores que son pixeles, llenos de sueños forjados por pesadillas.

"odio esta existencia" "odio estar atada a ti desde esta linea teléfonica, cambiare de número..."

Su estado es no conectado...

lunes, 1 de febrero de 2010

Seppuku

Escribo porque tengo atrofiado y seco el corazón, te escribo con la necesidad imperante de decirte todo esto de una vez, de ahogarme en la lluvia de esta tarde jugando a ser apocalipsis.

Hoy mientras desayunaba unas tostadas con huevos fritos por aquí, cuando la música decía palabras que logré articular. Hoy supe en varios años que la vida no tenía sentido, hay tantas razones para no vivir, como para continuar, es como elegir entre dos mujeres ambas hermosas.

Me he desviado, en fin, hoy quería decirte lo que por varios meses he dicho frente a un espejo cansado de observar el mismo rostro año tras año, la misma mirada inexpresiva que busca encontrar en el fondo la esencialidad de la felicidad y la tristeza.
Caminé junto a ti durante no sé cuantas horas, tú reias, gritabas, con razón sin razón, yo me preparaba como el samurai presto a cumplir con el seppuku (quitarme todas las vísceras que escondo de ti) .

Empezó llover, el ritual estaba listo a iniciarse, y el cielo taladraba con frías y húmedas lancetas este desierto llamado ciudad. Me giré hinque la katana con mucho esfuerzo mientras reías, no te diste cuenta, me desangré, pero tanto líquido evita siempre distinguir. Tú reias, tu lloraste, y luego reías otra vez, corriste mientras gritabas, yo desangrandome perdí el valor para continuar, agache la cabeza, la alze al cielo y miré entre tanta oscuridad, desde mi suelo pude ver tres tímidas estrellas que luchaban por mirar la tierra, testigos de mi cobardía, de tu estupidez y de la levedad de nuestras vidas.

"Tú, cómo vas"
"Sólo tengo un atardecer, en algún momento, un extraño atardecer y mi nostálgia a cuestas"

viernes, 29 de enero de 2010

Silencio

Y entonces caminamos uno junto al otro, el silencio era de esperarse. Estaba cansado de tener todo este cambalache de cosas dentro de la cabeza pero las palabras al querer salir todas de golpe se atascaron en algún lugar de la garganta. Silencio, silencio. El mundo gira a gran velocidad, el bullicio para permitir, para dar cuenta de la existencia es un completo silencio, un abismo entre ella y yo.

Vamos a construir, me digo mientras intento delinear y cartografiar su figura. Se acerca el final, pienso cuando la miro tan distante y llena de inexistencia. Pero por qué, esa pregunta me ronda desde algún tiempo atras.

Yo no lloro, pero a veces viene una rafaga de algo que no alcanzo a entender, creo que eso es también llorar.

Escuchando palabras que se escapan de si mismas, pero se ahogan al salir a la superficie, son sólo respiros o quiza inteligibles suspiros que se confunden con la orquesta de las hojas de los arboles que extienden sus brazos hacia abajo. Ella me mira de reojo y pregunta algo que paso rodando por su cabeza, o eso creo intuir. Camina, se adelanta, aligera el paso, tal vez sea como sus pensamientos: se apresuran, detienen, vuelven a la carga. Como si ellos mismos pensaran algo.

"Como inflar y desinflar un globo, eso creo que me está agotando, me siento... no lo sé. Esto es contraproducente"

La noche es buena, eso creo, oculta y protege. Pero me siento solo y no tengo ganas de continúar.
Solo hay dos opciones para mí, pero yo no tengo elección.

Nunca sabré mis opciones, y ella camina a mi lado mirando y buscando el silencio con la llave para encerrarlo en algún lugar.

No se si puedas decirlo pero entonces, tal vez sea demasiado tarde. Tengo una memoria a la que regresar...

El cielo está azul y la luna se oculta tras algunas nubes, quiero verla a ella y da miedo como me abraza el final. Es hora de despedirse.

"Ahora construire, mientras sujetamos con pinzas los recuerdos que vamos a incinerar, revolución eso puede llamarse"

Ella voltea para verme a través del cristal yo me pierdo en la lejanía, en el patio trasero donde encuentro los trastes viejos de mis recuerdos.

jueves, 21 de enero de 2010

Camino

Se encuentra en el límite del cansancio, sus piernas se mueven de forma autómatica por un lugar que sólo conoce de sueños, aquellos que realmente son sus pesadillas, de las que siempre huye.
Hoy en cambio va hacia esos macabros lugares, una llamada inexplicable lo atrae cada vez más. "para evitar mi destino" se dice mientras se acerca a la bifurcación de los sueños, las columnas gigantescas, el Joaquin y Boas: Guardianes inescrutables le cierran el paso "cuál es la señal". Él se detiene ante tal pregunta, es más fácil entrar que salir, piensa mientras busca en algún lugar de sus recuerdos las palabras mágicas para entrar en sus pesadillas.
"Cuál es la señal" repiten los guardianes "Cuál es la señal". Todo el territorio empieza a vibrar y las voces se hacen más intermitentes, como sacudidas por epilepsias diseñadas para las palabras, "Cuál es la señal, cuál es la señal" repiten más seguido. Todo gira, un cuervo baja a gran velocidad del cielo y se estrella en uno de los gigantes. En el instante de la colisión una lluvia de aves negras cubre el cielo verdoso de este lugar inventado. Colisión tras colisión la roca, o lo que sea el material del que estan hechos los monumentos, poco a poco se desintegra.

Un último grito se pierde entre el aleteo de los millares de pájaros. El cielo se ha perdido.
"La señal..." se dice el muchacho mientras siente que ha oscurecido y ve llover plumas negras, "Aqui el mundo es completamente distinto. La señal..." Poco a poco su espacio se reduce a una infinita miniatura que sobrevive pendiente de una respuesta.

jueves, 14 de enero de 2010

Laberinto

Hemos perdido contacto...

La última vez que le vimos dijo que iría a un lugar cercano a Rumania, estaba en un bosque seco que se extendia má alla de nuestra vista, el viento susurraba junto a la armónica de los cables de alta tensión que desafiaban el infinito, a los lejos un viejo y casi extinto rio luchaba por no abandonar su cauce.
El dijo: Hasta entonces
Nosotros no lo creimos y dimos la vuelta, no contamos los pasos, no volteamos hacia atras, no pensamos más nada.

Ese infinito estaba encerrado en un espacio finito, era un desierto o un bosque, pero en realidad creo que era el laberinto de su vida, su propia existencia reclamando por él.

La puerta de la entrada está abierta, en algún lugar, y el equilibrio distorsionado busca una forma de cerrarla.

Hemos perdido contacto, nos hemos huido de nosotros, de él, del mañana.

lunes, 11 de enero de 2010

Hola

Ella dijo: nuestra existencia sólo es una eterna despedida.
Al otro lado de la orilla del tiempo
Ella dijo: podras superarlo.

Ahora me pregunto, que sé yo de vacios, que sé yo de adioses...

domingo, 3 de enero de 2010

Dime

Han pasado tres décadas desde la última vez que se vieron. Se han posado sobre sus recuerdos la herrumbre del frenesí de la vida, de su absurda existencia.
Queda en los dos un sueño confuso, un árbol de otoño adornado con nieve bajo un cielo oscuro sin estrellas, queda una silueta y unas huellas en la nieve que se pierden junto al sueño/recuerdo.

La estación cruza miles de personas al día. Hoy ellos se miran. Caminan apresurados, cada quien tiene que validar su vida. Tropiezan, se piden perdón mutuamente no alzan los rostros y al continuar caminando ella voltea, él se detiene. Es verano y una lágrima cruza por la mejilla de ella, él sigue detenido frente a ella, unos pasos a su alcance, intenta decir algo... El móvil de ella suena. El mundo continúa como si nada, contesta y mientras gira no entiende porque esa gota salada de sí misma, se adelanta.
Él, detenido es golpeado por un hombre que camina y no se inmuta ante el evento, "por qué" se dice mientras su corazón da tropiezos, es tarde el reloj de la estación anuncia las ocho.
Nada ha cambiado, nada. Tiene que ir a casa. Recoge los vestigios del extraño suceso y se conduce con lentitud a donde nadie le espera.

"Tengo un sueño, uno donde estamos tú y yo, uno que no sé si sucedió..."

Ambos miran una foto vieja cada uno en casa, ella llora no sabe por qué, él se pregunta "este sueño. ¿Dejavu?"

Entonces... sólo queda un entonces entre los dos, un difuso sueño o un perdido recuerdo.